Hablar de sistemas de climatización cuando la época estival llega a su fin y el otoño entra por la puerta no es lo habitual. En realidad, aunque no lo creas, se trata del mejor momento. En otoño e invierno encontrarás precios más bajos debido a la baja demanda de los equipos. Otra de las ventajas de instalar tu sistema de climatización en esta época es que te encontrarás preparado para afrontar el calor del próximo verano y no te será difícil que un profesional pueda realizar la instalación rápidamente. Ser previsor siempre vale por dos. ¿Cómo elegir un sistema de climatización? Por todo esto, queremos hablarte de los diferentes sistemas de climatización y aire acondicionado que podrás encontrar en el mercado 👍
CLIMATIZACIÓN FIJA VS PORTÁTIL
En el mercado existen una gran cantidad de modelos de aire acondicionado que podemos dividir en dos grandes grupos; fijos y portátiles.
Los aparatos de climatización fijos necesitan algún tipo de instalación más o menos compleja y cumplirán su función exclusivamente en el espacio donde hayan sido instalados.
Por el contrario, los aparatos de climatización portátiles suelen disponer de ruedas, por lo que es muy fácil transportarlos de una habitación a otra.
LA CLIMATIZACIÓN FIJA
Como te hemos comentado anteriormente, este tipo de aire acondicionado necesita instalación, refrescará únicamente la habitación en la que se haya colocado y normalmente tienen más potencia.
En este grupo encontraremos tres tipos:
Aire acondicionado por conductos
Indicado para climatizar espacios amplios o varias habitaciones a la vez. Es un sistema centralizado que requiere una preinstalación compleja. Se trata de un equipo cómodo, eficaz y silencioso. En cuanto a su funcionamiento, consta de una unidad interior y otra exterior conectadas por una serie de tubos refrigerantes que serán los encargados de transformar el aire caliente en frío.
Todo el sistema queda oculto en un falso techo quedando a la vista únicamente las rejillas por las que saldrá aire refrigerado en cada estancia. Estos aparatos tienen una gran potencia de enfriamiento del ambiente y se trata de una buena elección para espacios amplios.
Aire acondicionado por cassetes
Su funcionamiento e instalación es muy similar al modelo por conductos. Este sistema funciona a través de una unidad interior instalada en el falso techo, un cassete que distribuye el aire por toda la estancia gracias a sus cuatro salidas de aire. Este sistema de aire acondicionado es el utilizado en grandes superficies tales como oficinas, naves o centros comerciales.
En cuanto a su diseño, se trata de aparatos extraplanos y muy discretos. Están fabricados para proporcionar una temperatura perfecta con el mayor ahorro energético posible.
Aire acondicionado Split
Este tipo de sistema de climatización es el más habitual en el hogar. Se utiliza para climatizar estancias o viviendas completas. Conocemos como Split a los aparatos que encontramos fijos en la pared de las habitaciones que queremos enfriar. Además, para su funcionamiento este sistema requiere de una unidad exterior, que generalmente quedará instalada en la fachada del edificio o en una terraza o balcón en el caso que sea posible.
El sistema Multi Split permite instalar varios aparatos internos conectados a una única unidad exterior, de esta manera podrás instalar un aparato en cada una de las estancias de la casa. Estos aparatos ofrecen un amplio catálogo de modelos con más o menos potencia y prestaciones. Son los más elegidos para uso doméstico debido a su excelente rendimiento y bajo consumo.
LA CLIMATIZACIÓN PORTÁTIL
Los aparatos de climatización portátiles se caracterizan por poder transportarse de una estancia a otra.
Aire acondicionado portátil
El funcionamiento de este tipo de aparatos es muy sencillo, toman el aire caliente de una habitación, lo enfrían en su interior mediante un sistema de tubos refrigerantes y posteriormente lo expulsan al exterior de la estancia refrigerado.
El reqiusito imprescindible de instalación de este tipo de sistema de climatización es que debe colocarse junto a una ventana para que pueda expulsar el aire caliente sobrante al exterior de la estancia.
Climatizador evaporativo
Se trata de un sistema que renueva y refresca el aire sin resecar el ambiente y con un mínimo gasto energético.
El climatizador evaporativo no es exactamente un aparato de aire acondicionado ya que utiliza agua o hielo para enfriar el aire sin recurrir a ningún gas o líquido refrigerante como hacen otros aparatos. El climatizador se encarga de atrapar el aire caliente de la estancia haciendo que pase por un filtro húmedo (por efecto de la evaporación del agua que contiene en su interior) y lo devuelve más fresco con ayuda de un ventilador.
¿QUÉ DEBO TENER EN CUENTA A LA HORA DE ELEGIR MI SISTEMA DE CLIMATIZACIÓN?
Antes de elegir un sistema de climatización que consiga la temperatura idónea en tu hogar y al mismo tiempo te permita un ahorro de energía, debes prestar especial atención a las prestaciones que ofrece cada aparato.
Los puntos más importantes que debes tener en cuenta en tu elección son:
El espacio que voy a climatizar
Es importante que sepas aproximadamente las dimensiones del espacio a climatizar, ya que dependiendo de una extensión u otra necesitarás un aparato con más o menos potencia refrigerante. No es lo mismo enfriar una sala grande que una pequeña, ni climatizar una casa con buen aislamiento que otra donde el asilamiento sea insuficiente y se produzca una transferencia de calor importante entre el interior y el exterior. En este caso deberás fijarte en una característica técnica de gran importancia; las frigorías.
Las frigorías son la unidad de medida para cuantificar la capacidad de refrigeración de un sistema y para su cálculo emplearemos los metros cuadrados de la zona que queremos climatizar. Una buena aproximación para determinarlas son unas 100/140 frigorías por cada m2. Así, por ejemplo, en un piso de 60 m2 necesitarás un sistema de climatización que genere unas 3.000 frigorías. Antes de elegir tu aparato, haz este cálculo y elige el modelo que tenga la potencia suficiente como para climatizar ese espacio.
La eficiencia energética
Otro de los factores que debemos tener en cuenta es el consumo del aparato de climatización y por lo tanto su eficiencia energética. Esto podremos comprobarlo verificando la etiqueta energética de cada aparato:
- Clase A: prácticamente se han dejado de fabricar.
- Clase A+: consume hasta un 10% menos que uno de clase A.
- Clase A++: consume hasta un 16% menos que uno de clase A.
- Clase A+++: puede llegar a consumir hasta el 40% menos que uno clase A.
En este sentido, elegir modelos más eficientes puede repercutir en un desembolso inicial más alto, pero a la larga se traducirá en una factura de electricidad más baja.
Tecnologia Inverter
Es importante que compruebes que el aparato de climatización elegido disponga de tecnología inverter. Este sistema que maximiza y mejora el funcionamiento de los aparatos de refrigeración frente a los aparatos tradicionales, los cuales emplean el 100% de su potencia para lograr la temperatura deseada, lo que se traduce en un mayor consumo eléctrico y un mayor gasto en la factura.
La tecnología Inverter se encarga de potenciar la capacidad de refrigeración y mantenerla constante, reduciendo el consumo energético. Por este motivo, es habitual que los modelos actuales dispongan de este sistema.
Tipo de gas refrigerante
La refrigeración de los sistemas de aire acondicionado se realiza a través de circuitos de frío-calor en cuyo interior es recorrido por un gas refrigerante. El empleo de un gas u otro repercute a nivel ambiental, por lo que tener esta característica en cuenta a la hora de elegir el aparato es de gran importancia.
Es interesante decantarse por un sistema de aire acondicionado con refrigerante R32, más eficiente que su antecesor el R410, y más respetuoso con el medio ambiente.
Tipos de filtros
La función de los filtros es atrapar partículas de polvo, humos y otros elementos nocivos para la salud que puedan encontrarse en el aire. Por esta razón, es fundamental realizar un mantenimiento, limpieza o sustitución según necesidades.
En el mercado encontramos filtros de muchos tipos, incluso lavables, que evitarán que tengamos que sustituirlos cuando se obstruyan. Un sistema de aire acondicionado puede disponer de filtros fijos o sustituibles dependiendo del modelo y fabricante. Es muy habitual que se puedan desmontar para su limpieza.
Entre los tipos de filtros que existen encontramos:
- Filtro foto catalítico, se limpia con la luz solar.
- Filtro de plasma o neoplasma, capaces de purificar y desodorizar el aire, perfectos para personas alérgicas y asmáticas.
- Filtro de carbón activo, para absorber los malos olores o el humo del tabaco.
- Filtro iónico, para mejorar la calidad del aire.
Recuerda que puedes complementar tu sistema de climatización con un termostato analógico, digital o WiFi.
Con toda esta información ya estás listo para escoger el sistema de climatización que mejor se adapte a tus necesidades. ¡Que el calor te pille preparado! 😉