Si has llegado hasta aquí es porque amas a tu peludín y siempre quieres lo mejor para él. Sabemos que te encanta tenerlo dentro de casa el mayor tiempo posible, pero en ocasiones es necesario contar con un refugio en el que pueda resguardarse, tanto del calor como del frío, cuando se encuentra en nuestro patio o jardín. ¿Necesitas ayuda? Aquí te dejamos las claves para escoger la caseta perfecta para tu perro.
¡Acierta con la compra!
DECIDIR LAS DIMENSIONES
Antes de escoger una caseta es imprescindible que midas a tu mascota y tengas claras las dimensiones que necesita. Presta especial atención a este aspecto, ya que la caseta elegida deberá ser lo suficientemente amplia para que nuestro peludo se tumbe dentro de ella, pero ojo, sin excedernos con el tamaño. Una caseta demasiado grande podría resultarle incómoda y fría en invierno puesto que no mantendría el calor en su interior.
Habitualmente, el tamaño de la caseta perfecta ha de ser entre un 25 y 50% más de la altura del animal (medido desde las patas hasta la cabeza).
En cuanto al largo, te recomendamos que sea un poquito más grande de las dimensiones de nuestro perro, excluyendo siempre la cola.
Piensa que deberá ser fresca en verano y cálida en invierno, por ello recalcamos la importancia de tomar como referencia las medidas de tu peludo antes de escogerla.
ELEGIR EL MATERIAL: MADERA O PLÁSTICO
Una vez tengas claro el tamaño, vamos con el siguiente paso: elegir el material.
Las casetas más habituales que encontrarás en el mercado son de plástico o madera. La elección de un modelo u otro dependerá del clima en el que vivas y por supuesto, del presupuesto del que dispongas.
Las casetas de perro de plástico suelen estar fabricadas en resina, un material duradero y resistente ante agentes atmosféricos como la lluvia, los rayos ultravioleta y la humedad. Son muy higiénicas y súper sencillas de limpiar. En muchas ocasiones son desmontables por lo que la limpieza profunda con agua y jabón neutro está garantizada. En cuanto al precio, son más económicas que los modelos de madera y, además, son muy ligeras de transportar.
Las casetas de perro de madera son la opción más aislante debido a las propiedades naturales de su material. Una opción resistente con un diseño de casita que enamora. Una de las desventajas de este tipo de modelo es que la madera puede pudrirse ante un exceso de humedad, por eso si escoges esta opción, te recomendamos que instales la caseta en alto o sobre una base de hormigón, de este modo la madera no quedará en contacto directo con el suelo. Otra de sus ventajas es que, si eres manitas, podrás diseñarla y construirla a tu gusto.
¿CÓMO AISLAR DEL FRÍO LA CASETA DE MI PERRO?
Para conseguir un ambiente más cálido y confortable en el interior puedes instalarle a la caseta una puerta, de esta manera quedará aun más resguardado del viento.
Otro de los puntos que debes tener en cuenta, es que es aconsejable que la caseta disponga de techo a dos aguas para que la lluvia no se acumule, evitando así filtraciones en su interior.
Otras de las cosas que puedes hacer para proteger a tu peludo del frio invierno es impermeabilizar las paredes de la caseta con un buen aislante térmico.
Aun así, no hay mejor calor que el del hogar. Por ello te recomendamos que tengas dentro de casa a tu peludo siempre que puedas y evites exponerle a temperaturas extremas. Te lo agradecerá 🐾
IMPORTANCIA DE LA UBICACIÓN
Dependiendo de donde ubiques la caseta, tu perrete se encontrará más o menos aclimatado. Como habrás podido observar son animales de costumbres, por lo que tienen sus lugares preferidos tanto dentro de casa como en el jardín.
En base a esto, procura ubicar y orientar la caseta en una zona en la que suela estar, de esta manera se sentirá más cómodo y relajado. Si este sitio se encuentra resguardado del viento pegado a la pared o algún muro, ¡mejor que mejor!
Igual de importante es vigilar que la caseta no se encuentre a pleno sol en verano, y en un rincón sombrío en invierno.
MÁXIMA LIMPIEZA Y BUEN MANTENIMIENTO
Mantener la buena higiene de la caseta de nuestra mascota es de vital importancia para su bienestar y salud. Por ello es imprescindible que revises su estado y la limpies a fondo, al menos una vez al mes.
Como te hemos comentado anteriormente, si se trata de una caseta de plástico podrás limpiarla con agua y jabón neutro. ¡Quedará como nueva!
En el caso de que la caseta de tu perro sea de madera, presta especial atención a la aparición de hongos y bacterias en su superficie y evita en todo lo posible que entre en contacto con el agua y la humedad. Una buena opción es que la coloques sobre una plataforma de hormigón o cemento. Para tratar la madera, aplícale productos específicos para tal fin evitando siempre que tu perro se encuentre alrededor cuando lo hagas.
TOQUE FINAL, ¡AÑÁDELE UNOS COMPLEMENTOS!
Para darle un plus de confort, colóca su colchoneta o cojín junto a sus mantitas preferidas. Recuerda que la mayor pérdida de calor de la caseta se da a través del suelo, por lo que es importante que esté totalmente protegida en invierno para ayudarle a entrar en calor.
En los meses de verano, opta por mantas refrigerantes que le ayuden a soportar las altas temperaturas. Las encontrarás en cualquier tienda de accesorios de mascotas.
Sigue todas estas claves y conseguirás la caseta perfecta para tu perro. Recuerda que ante cualquier duda sobre nuestras casetas de plástico puedes ponerte en contacto con nosotros. ¡Mima a tu peludín, se lo merece todo! 😉